Cuantos vendedores de humo
durante años dijeron,
que para los tiempos actuales
se conquistarían los cielos.
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Que con naves espaciales
se encontrarían lugares,
que pudiesen ser refugio
frente a inciertos avatares.
.
Ya que el planeta y sus cambios
tan nocivos y ligeros,
muestra estar deteriorándose
y es su fin más tempranero.
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Pero lo cierto es que en vano
y a pesar de tanto viaje,
no se alcanzó a descubrir
otro lugar habitable.
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También se supo decir
sobre la naturaleza;
que era fuente inagotable
de provisión y riqueza.
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Que todo se reciclaba
y volvía a renacer,
y que la abundancia plena
siempre se iba a sostener.
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Pero el cuento acaba pronto
y aunque los tiempos apuren,
si es que de aquí no saldremos
pongamos cuidado, al menos,
para que todo más dure.
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Autor: Jorge Horacio Richino
Buenos Aires, Diciembre de 2008
Todos los derechos reservados.
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